Asín que le da para comprarse un pisete de 40 millones, por ejemplo, y vivir con los otros 17. Si se conforma con el pisete (pisete en Madrid, en otras poblaciones puede dar para otras soluciones habitacionales más chachis) el año siguiente le quedan los 57 para vivir y gilipolleces varias.
Vamos al caso en que lo encuadran los chicos (Fco. Pelayo firma el artículo) del 20 minutos, que es el caso de los futbolistas extranjeros profesionales. A ver, yo es que el tema lo sigo lo más de lejos posible (y eso, en este mundo de medios de comunicación, la verdad que es poco lejos), pero alguno cobra 1.000 milloncetes, ¿a que sí? Con lo que lo anterior se multiplica todo por 10; menos el pisete, que para qué coño te vas a comprar 10 pisetes de 40 kilos (ah, sí, para especular, que vuelven a subir), te compras un chalecillo y tal, y te quedan 170, de los que les das 150 a una ONG (oye, que igual los futbolistas africanos, que cobrarán un pelín menos, sí envían pasta a su país en esa proporción) y el resto, para tapas.
Pues mira por donde, que a mi me parece chachi guay la medidita. No por la envidia esa cochina por que la peña se levante toda esa pasta, que también es por eso, ahora me iba yo a andar intentando engañaros; es porque la Liga de Fútbol Profesional (LFP) ha amenazado con parar la competición. ¡Hoooossstiiii! Y tampoco es porque el fútbol profesional me produzca sarpullidos (en cambio, no me opongo a echar una pachanguita, eh, tomad nota). Noooooo....
...es por la infinitas posibilidades que abre el tema. ¡¡Españiiia sin fúrbol!! ¡¡El pueblo sin circo!! ¿Qué interesantísimas cosas podrían ocurrir?
- La gente no sabría que hacer los días anteriormente de partido. ¡Cielo santo, a lo mejor veían otras cosas en la tele! ¡Rápido, echemos más telebasura con grandes hermanos de belenes estebanes, no sea que haciendo zapping caigan en algún documental y les de por pensar! ¡Peor aún, podrían leer!
- ¿Y si a lo mejor salen a la calle a jugar ellos al fútbol? ¿Hacemos más campos de deporte? ¡Son caros! ¡Además igual se lesionan, más gasto para la Seguridad Social! ¡Menos producción!
Pero no, todo esto no ocurriría. No. En realidad, las turbas, enloquecidas, asaltarían primero el Congreso, el Ministerio de Hacienda, el Bernabéu, Antena 3, Telecinco y otras instituciones; para seguir con los supermercados, los bancos, las urbanizaciones de lujo... Los políticos serían linchados. El sistema se derrumbaría como un castillo de arena ante la marea proletaria exigiendo su soma...
¡¡Anda ya, coooñeeee!! ¡Adopten la medida ya, hombre, aunque mis anhelantes imaginaciones nunca se hagan realidad! Pero no sean cabrones; que valga también para los españoles que ganen esa pasta (¿a que no hay huevos de fastidiar a los amiguitos ricos, ein?), que si no, es discriminatorio, demonios.
